Ayer cuando me levanté… ¡Horror! ¡Se me acabó la canela! Un día laboral es bastante malo estando en el paro, pero si encima perdemos el placer de desayunar con calma… ¿Qué nos queda? Pues eso, que mi requesón con miel y frutos secos, sin canela pierde bastante.
Así que aprovechando el solecito… Me fui a una tienda que tenía muchas ganas de conocer: Spicy Yuli, en el barrio de Malasaña en Madrid. Más de 80 especias y 90 tipos de tés e infusiones se arremolinan en las estanterías de esta pequeña tienda.